No se necesita ser un ingeniero de la NASA para adivinar que el color juega un papel muy importante en el mundo visual. El color nos afecta de diferentes maneras, creando ambiente, camuflando la presa de su depredador, advirtiéndonos de un peligro no muy obvio, etc. A pesar de que el color nos rodea a todos por igual, como individuos, percibimos los colores de manera distinta: lo que yo veo azul, puede que tú lo veas verde, y lo que llamas azul (porque así lo conoces) para mi es verde, y viceversa. Es un tema flipante y apasionante que bien merece un post para él sólo…
Además de hablar del color en general, me gustaría hablar del color que me ha seguido o que inconscientemente yo he seguido a lo largo de mi vida y con el que he tenido una relación de amor odio…. El color naranja. Muchos ya lo sabéis, pero otros no; soy australiano y crecer en Sydney siendo un rubio/pelirrojo, hace que te conviertas en el centro de la mayoría de las burlas del patio del cole, especialmente de los motes… “Hey zanahorio…” era una de las más obvias, hay muchísimas más (en inglés), pero perderían su sentido si las tradujese. Una de los motes que más recuerdo es el de “Valéncia”… “Hey Valéncia…” me gritaban desde la otra punta del patio, proveniente de una mente algo más original, repitiendo lo que leía en la etiqueta de una naranja importada que sujetaba en su mano. Fué la primera vez que escuché la palabra Valencia, sin saber que años después se convertiría en mi ciudad de “adopción”.
A lo largo de mi carrera profesional; desde que diseñaba portadas de discos en una multinacional australiana, pasando por varias agencias en Londres y aterrizando por fin en Valéncia; me he peleado con el color naranja … es un color que los clientes adoran, “Me encanta el logo pero… puedes hacerlo en naranja?”…, y que algunos diseñadores odian, como yo (si no se emplea adecuadamente). Podría continuar eternamente pero no voy a hacerlo. Podría contarte como en mi trayecto diario hacia el trabajo, veo montones de letreros naranjas, toldos naranjas, etc…. pero tampoco… También podría citar Wikipedia: “El color naranja está entre el rojo y el amarillo en el espectro visible de longitud de onda de aproximadamente 585–620 nm, y tiene un matiz de 30º en el espacio de color HSV. Numéricamente está a mitad de camino entre el rojo y el amarillo en una gama comprimida del espacio de color RGB, la expresión del cual es la rueda de color RGB. El color complementario del naranja es el azul; sin embargo, algunas tonalidades pueden ser consideradas como mejor complementadas con colores basados en verdes, por reacciones de cono del ojo. Los pigmentos naranja pertenecen mayormente a las familias del ocre y cadmio, y absorben principalmente la luz azul”…. pero no….
Realmente, a donde quiero llegar es a que probablemente habrás notado que no sólo es un color, también es una fruta, y como angloparlante, tras aprender español, me sorprendió que no solamente nosotros, los anglos, uitilizábamos la misma palabra para referirnos a ambas cosas.
Así mi pregunta sigiuente… ¿qué fue primero, la gallina o el huevo?
Bueno he investigado un poco sobre el tema. Otro “injerto” desde Wikipedia: “La palabra española «naranja» proviene del sánscrito narang, sin embargo no es una palabra nativa a esa lengua sino que se especula que la tomó de las lenguas drávidas como el tamil donde se dice narandam a la ‘naranja amarga’, nagarukam a la ‘naranja dulce’, siendo nari ‘fragancia’. La palabra junto con la fruta fue lentamente llevada hacia poniente: del sánscrito pasó al persa (nārensh), luego al árabe (naranj, el árbol, y naranjah el fruto) y de ahí al español «naranjo» y «naranja», respectivamente.”
Se difundió a otros idiomas europeos en un curioso proceso: los portugueses cambiaron la ene inicial por una ele (laranja), al pasar al italiano para que la ele inicial no redundara con el artículo «la» se le eliminó la ele inicial (arancia) mientras que al pasar al francés y al latín se relacionó con el lexema oro (or y aurum) resultando orange y aurantium. Debido a que en la Edad Media el idioma culto de Inglaterra era el francés, en inglés pasó tal cual como orange…
Pues eso…. tanto si odias el color como si cuando comes naranja te produce acidez, tenemos que admitir que es genial que la comunicación esté conectada con nuestro entorno. Como en nuestro sector, donde estamos siempre intentando simplificar la comunicación. Por esto creo que como ejemplo de un “brief” basta con centrarse en el ejemplo de la Naranja, naranja…
Amunt València!!!
Quiero dedicar este post al Albert Szent-Györgyi descubridor de la Vitamina C, quien cumpliría hoy 118 años.
Por otro lado, me gustaría escuchar tus historias/cuentos de la Naranja, Naranja… Si tenéis alguna pista sobre que fué primero “la gallina o el huevo” escribidlas aquí. Me interesan vuestras reflexiones.
Gavin Turner
Dirección de arte